Tristemente, después de nuestra llegada; por disposición oficial era obligatorio realizar un periodo de cuarentena, por lo tanto pasamos nuestras primeras semanas en Alemania encerrados, ¡aunque no fue tiempo perdido!, ya que de igual manera fue toda una aventura; desde tomar agua del grifo hasta probar diferentes tipos de quesos y jamones todos los días; además comenzamos con nuestro curso de alemán de manera virtual.
Una vez finalizada la cuarentena, pudimos conocer a nuestras maestras de manera presencial, explorar Münster y también reunirnos con todos los amigos.
El tiempo transcurrió demasiado rápido, ya que esa fue nuestra última semana viviendo juntos y el inicio de nuestras actividades se acercaba.
Gievenbeck.
Gievenbeck es un distrito perteneciente a Münster y se encuentra aproximadamente a veinte minutos del centro de la ciudad.
Mi primera semana de trabajo fue uy exhaustiva y emocionante, ya que recorrí Gievenbeck, el lugar en donde estaré viviendo, además también visité los lugares en donde estaré realizando mi servicio de voluntariado que igualmente se encuentran aquí; también durante esa semana conocí a muchas personas y me presentaron ante la comunidad en las diferentes iglesias que conforman a la parroquia de Liebfrauen Überwasser; ¡Ya me sentía emocionada y al mismo tiempo nerviosa por comenzar con mis actividades!.
Sin embargo, a pesar de haber recorrido caminando todos estos lugares con la intención de conocer el lugar y sobre todo aprenderme los caminos que podía tomar para regresar a casa; al día siguiente, camino a una reunión me perdí de inmediato, por lo cual tuve que recurrir a la ayuda de maps.